Si quieres conocer mejor las emociones de tu perro, observando los movimientos de su cola, puedes leer este artículo en el diario EM, donde también puedes conocer algo más sobre las diferencias entre los hemisferios cerebrales derecho e izquierdo, en algunos animales y en la especie humana.
Mes: mayo 2007
Grasas "trans"
Se habla mucho en los últimos tiempos de este tipo de grasas; vamos a intentar aclarar en qué consiste y cuales son sus problemas.
Hagamos algo de historia: entre las décadas de los años 80 y 90, la preocupación por la ingesta de colesterol llevó a generalizar el uso de una tecnología que consistía en transformar los aceites vegetales en grasas sólidas; así surgió la margarina 100% vegetal. Un producto sin colesterol, una molécula que encontramos en los alimentos de origen animal. Se asoció la ingesta de la margarina con una mejora en la alimentación y con la reducción de las enfermedades cardiovasculares. El consumidor, acostumbrado a ingerir mantequilla, prefería tomar un producto sólido (margarina) a un aceite (líquido).
En esencia, el mencionado proceso tecnológico consiste en romper los ácidos grasos poli-insaturados existentes en muchas grasas vegetales: la presentación de una grasa, su aspecto a temperatura ambiente, depende de su grado de insaturación. Cuanto más insaturada sea una grasa más líquida aparecerá y cuanto más saturada, más sólida y compacta la apreciaremos; si rompemos los dobles enlaces, haremos más sólida la grasa. Al romperse estos, muchos de los que quedan cambian de forma y pasan de un aspecto cis a otro trans: los ácidos grasos, componentes de las grasas, no se pliegan y quedan con un aspecto muy parecido a los saturados. Queda alterada la molécula en una pequeña proporción, ajena al organismo humano, con comportamientos aún no del todo conocidos y efectos muy negativos en nuestra salud: aumento del colesterol y de las enfermedades cardiovasculares. Ya estamos comenzando a conocer otros problemas que se están investigando actualmente; por ejemplo también pueden retrasar el crecimiento y la maduración del cerebro, ten en cuenta que las grasas son esenciales, forman parte de la membrana de las células, y la presencia de las mismas puede llevar al organismo a formar paredes celulares defectuosas.
La incorporación de este tipo de grasas hace que aumente la vida útil de los productos en los que se emplea este proceso, potencia su sabor y mejora su textura. Además, la adición de grasas hidrogenadas a los productos abarata los costes. Evitar las grasas trans es difícil, ya que forman parte de muchos alimentos; encontrarás en las etiquetas «grasas hidrogenadas» o «parcialmente hidrogenadas», eso te dará la pista. Se encuentran con frecuencia en aperitivos salados (palomitas o fritos), productos precocinados (empanadillas, croquetas, pastas o pizzas), galletas, margarinas y bollería industrial. Si consumes muchos de estos alimentos, debes mirar más las etiquetas. El problema es abusar de ellas, un consumo moderado no generará problemas en tu salud.
( Fuente: adaptado de la página web de Consumer)